Descubre alguna de las mejores playas vírgenes de Mallorca sin falta de sudar, aparcando en la misma arena, y disfruta, si te apetece, de las mejores excursiones caminando por el litoral del Parque Natural de Llevant.
Después de haber recorrido por tierra, mar y aire las 284 playas y calas de Mallorca y de haberlas documentado con todo lujo de detalles en mi guía de “Todas las playas de Mallorca” llega el momento de escoger para ti alguna de las mejores playas vírgenes, pero para comodones, para los que os cueste tener que caminar del coche a la arena. Hay incluso una con chiringuito (para que no te falte la cervecita bien fría). Pero antes quiero romper una lanza a favor de Mallorca, mi querida Roqueta, la mayor de las Islas Baleares. Y quiero defenderla de quienes afirman que aquí solo hay bloques de hormigón y playas atestadas de turistas venidos del norte. De los que solo se fijan en ella cuando es noticia por los altercados entre jóvenes británicos y eso que llaman el balconing, la peligrosa moda que tantos disgustos nos ha dado, como si esto fuera el mal de toda una isla.
Pero no. Amigos míos… eso no es Mallorca.
Mallorca es una isla repleta de parajes protegidos y parques naturales a los que solo llegan los viajeros (que no los turistas), de tramos de costa vírgenes con playas hermosísimas además de un Parque Nacional (el del archipiélago de Cabrera) que es único en el Mediterráneo.
Y para redescubrir esta otra Mallorca yo os recomiendo, por ejemplo, centrar vuestra atención en el Parque Natural de Llevant, en el extremo NE de la isla. Estos parajes atesoran playas vírgenes como las de cala Torta, Mitjana, Es Matzoc, Sa Font Celada, Arenalet des Verger… y lo más curioso que hay algunas (las dos primeras) a las que se puede llegar en coche hasta la misma arena, para gusto de los más comodones.
Son arenales donde todavía es posible la felicidad plausible: la de estar con los pies enterrados en la arena y la mente en las nubes, la de disolverse en esas aguas de esmeralda y turquesa líquida sin ver nada más que maquia mediterránea a tu alrededor. Como si nada hubiera cambiado desde aquellos tiempos en que sufríamos los ataques de los sarracenos y los piratas turcos.
Ochenta y cuatro atalayas contra los piratas.
Y lo de los sarracenos viene a cuento de la torre de defensa que se ve desde la playa de Es Matzoc, que es preciosa. La playa y la torre.
Imagínatela, ahí apostada, al borde del precipicio, asomada al Mediterráneo, como intentando atisbar en el horizonte la llegada de naves enemigas. Se puede (y se debe) subir por unas escaleras interiores de caracol y asomarse al vacío. Y sentarse a intentar imaginar cómo sería la vida de aquellos antiguos torreros.
Esta atalaya junto con otras ochenta y cuatro más fueron construidas a lo largo de todo el litoral mallorquín como sistema de vigilancia y defensa, ya que tras la invasión cristiana acaecida en 1229, los saqueos y expolios sobre las ciudades costeras de Mallorca por parte de los sarracenos fueron un continuo. Querían recuperar lo que había sido suyo. Es por ello que la mayoría de los grandes núcleos, a excepción de Palma, fueron construidos a cierta distancia de la costa, mientras que se mantenía un pequeño reducto a orillas del mar conocido como “port de” (Port de Soller, Port de Pollença, Port de Alcudia, Port de Andratx…). Porque nadie quería vivir cerca de la costa, de donde se sabía que nada bueno podía venir. Qué cosas…¿verdad? Ahora ocurre todo lo contrario. Que todos quieren tener vistas al mar y vivir bien cerquita de él.
Pero lo de alejarse de la costa no fue suficiente y al final se tuvo que diseñar algún sistema de vigilancia que alertara con la suficiente antelación de la llegada de naves enemigas. Inicialmente se constituyó un grupo de voluntarios que hacía guardia día y noche, así hasta que se construyó durante el siglo XVI esta red de torres de vigilancia intercomunicadas visualmente entre sí. En estas atalayas permanecían vigilando, día y noche, un grupo de dos o tres hombres. Estaban contratados por los vecinos del pueblo y alertaban de la presencia de tropas enemigas mediante señales de humo (de días) y fuego (de noche). Estaban intercomunicadas visualmente entre sí hasta que llegaba la noticia a Palma, donde se encontraba la Torre de l’Àngel, que actuaba como central militar y desde la que se tomaba la decisión de mandar las tropas necesarias. Mientras el tiempo apremiaba, y las gentes de los pueblos, armadas con palos y espetones, debía combatir como pudiera contra la furia de los afilados sables de los sarracenos.
Hoy aquellos tiempos han pasado pero estas playas siguen igual. Igual de vírgenes y hermosas. Estas y muchas otras más. Por eso quiero invitaros a redescubrir Mallorca y sus 284 playas y calas, las que solo se recogen en mi guía de “Todas las playas de Mallorca” muchas de las cuales aún se conservan vírgenes y esperando a ser descubiertas. Dadle una oportunidad y no la juzguéis antes de haberla conocido de verdad. Porque Mallorca esconde muchas sorpresas.
LAS PLAYAS DEL PARQUE NATURAL DE LLEVANT
👉 Playa Cala Torta. La primera gran playa del Parque Natural de Llevant.
El Parque Natural de Llevant es una de las porciones de costa mallorquinas mejor conservadas, un auténtico reducto de la naturaleza que subsistió (de milagro) frente a la llegada turbadora del hormigón. Aún se conservan los viales de lo que fue un intento especulador, pero que no llegó a nada, y que ahora nos sirven para llegar en coche (no sin esfuerzo, pues hay tramos muy bacheados) hasta cala Torta, la primera gran playa del Parque Natural, o cala Mitjana, según el desvío que se tome. Virgen, poco que caminar y con chiringuito: extraña rareza natural. ¡Y un milagro!
Accesos: En coche hasta la misma playa.
Si quieres saberlo todo sobre esta y las otras 284 playas y calas de Mallorca consulta mis guías aquí.
👉 Cala Mitjana. Una playa virgen con acceso en coche.
¿Te imaginas poder llegar en coche hasta una playa 100% natural? Se trata de Cala Mitjana, una playa de arena blanca que se conserva totalmente virgen a pesar de los intentos especuladores. Gracias a que no se encontraron los acuíferos necesarios las obras se paralizaron dejando solo los pistas construidas, las que ahora nos permiten llegar en coche hasta esta extraña rareza natural. El paraje es soberbio y ofrece varias excursiones, por si tomar el sol y nadar en una playa virgen no fuera suficiente.
Accesos: En coche hasta la misma playa.
Si quieres saberlo todo sobre esta y las otras 284 playas y calas de Mallorca consulta mis guías aquí.
👉 Playa de Es Matzoc. La cala de los torreros.
La costa de Mallorca estuvo protegida por una guirnalda de atalayas de defensa intercomunicadas entre sí visualmente, y una de ellas, una de las más hermosas y mejor conservadas, es la de Matzoc, en el Parc Natural de Llevant. Recuerdo haber pasado aquí una noche como uno de aquellos talaier, custodiando las estrellas y los destellos de plata que lanzaba la mar, y al amanecer, lo primero que hice fue sumergirme en las aguas de esta maravillosa playa deseando que todo siguiera estando tal cual durante otros 500 años. O más. Acércate cualquier día de estos, sube las escaleras, asómate, e intenta imaginar como fue la vida de los primeros talaiers… Siente la soledad austera de estas tierras. Redescubre nuestra maravillosa isla.
Accesos: Caminando 1.200 m.
Si quieres saberlo todo sobre esta y las otras 284 playas y calas de Mallorca consulta mis guías aquí.
👉 Sa Font Celada. Un prodigio natural.
Cuando llegues caminando desde cala Mitjana y te asomes a la Torre de Matzoc descubrirás emocionado (o agotado) que el camino prosigue con gracia serpenteando al borde del mar hasta llegar a este prodigio natural, una playa virgen como pocas donde solamente el tiempo y la soledad esculpen la vegetación austera de los cantiles. Pocos llegan a pie hasta aquí (son 5 km). Te lo aseguro. Y los que lo hacen lo disfrutan como nadie. Sigue el senderillo que desciende súbitamente hasta quedar medio colgado al borde del mar y entonces serán los hitos (o fitas), esos montoncillos de piedras, frágiles esculturas improvisadas por el senderista, quienes marquen tu camino. Gózalo, que te lo mereces.
Accesos: Caminando 5.000 m.
Si quieres saberlo todo sobre esta y las otras 284 playas y calas de Mallorca consulta mis guías aquí.
👉 Arenalet des Verger. En el corazón del Parque.
Si viniste caminando a la vera del mar desde cala Torta puede que sea esta la meta que estabas buscando: la de un merecido baño en soledad como recompensa; pero quizás prefieras explorar el corazón del Parque Natural y coronar la cima de S’Atalaia Moreia y sus vistas de vértigo… Entonces caminarás al borde mismo de la zona protegida y estarás a punto de descubrir la zona más agreste de la Península de Llevant. Si se te echa el día encima tienes dos refugios cerca (muy solicitados, eso sí), el primero, el de S’Arenalet, al borde mismo de la playa (también es zona de acampada) y el segundo, el de Els Oguers, con unas vistas maravillosas 900 m pista arriba (infórmate de estos dos y del refugio de s’Alzina en la web de Ibanat www.caib.es o en el tel.: 971 177 652). Dentro del parque puedes realizar hasta doce diferentes rutas autoguiadas (hay diversa señalética instalada por todo el parque y alrededores), aunque también puedes asistir a las rutas guiadas que se organizan cada sábado (infórmate www.balearsnatura.com o en el Centre d’informació s’Alqueria Vella de Baix, muy cerca del km 4,7 de la carretera Ma-333, tel.: 606 096 830). Además de calas como esta, de las más espectaculares de todo el litoral insular, tienes mucho más que ver y experimentar en la que se considera una de las zonas de paisaje más rico y diverso de Mallorca.
Accesos: Caminando 5.500 m.
Si quieres saberlo todo sobre esta y las otras 284 playas y calas de Mallorca consulta mis guías aquí.
Si quieres conocer las siete mejores playas de Mallorca para amantes de la naturaleza haz click aquí.
¿TODAVÍA TE LO ESTÁS PENSANDO?
¡REDESCUBRE MALLORCA Y ESCAPA CONMIGO DE LAS MASIFICACIONES!
Aquesta informació hauria de ser secret d estat.
Perquè li Donau publicitat.
Aquest tipus de pàgina prostitueix Mallorca